Xbox Game Pass es un gran servicio de suscripción donde los usuarios de Xbox, sin importar la consola, pueden acceder a un catálogo de más de 100 juegos, a través de un pago mensual. Dichos juegos son tanto actuales como antiguos. En el caso de estos últimos, son títulos que han marcado un antes y un después en la historia de Xbox y ahora pueden disfrutarse gracias a la retrocompatibilidad. Además de la nueva tecnología FPS Boost, la cual permite a los jugadores disfrutar de los juegos retrocompatibles con una tasa de frames por segundo superior a la de la versión original.
El servicio de videojuegos de Microsoft está siendo todo un éxito, superándose año tras año desde su estreno en 2017. Pero su gran popularidad no viene a través de añadir juegos sin ningún miramiento, ya que tal y como ha comentado Ben Decker, jefe de marketing de servicios de Xbox vía Eurogamer, Microsoft apuesta por la calidad y no la cantidad a la hora de añadir nuevos juegos a Xbox Game Pass.
Los miembros nos pidieron que priorizáramos la calidad del título sobre la cantidad, y que nos aseguráramos de que la biblioteca se actualice con regularidad para que siempre haya algo nuevo para jugar. Seleccionamos la biblioteca teniendo en cuenta la diversidad de nuestros 18 millones de miembros. No está destinado a estar lleno de miles de juegos, y nuestros miembros han dicho que esa es su preferencia.

Después de preguntarle a Ben Decker sobre la cantidad de juegos que se encuentra...