Fortnite, uno de los juegos de moda y uno de los máximos exponentes del género battle royaleha traspasado la frontera de los videojuegos para convertirse en todo un fenómeno social en los últimos años, a pesar de comenzar a caer sus ingresos. Los más jóvenes son especialmente vulnerables en este tipo de fenómenos de masas, lo que ha generado en una demanda legal a Epic Games por lo adictiva que es la propuesta del juego para los niños, tanto como la cocaína, asegura.
Concretamente, esta demanda se ha interpuesto en la ciudad de Quebec, Canadá, en relación a dos niños que padecen de adicción al videojuego, comparada a la que sufren los adictos a la cocaína por la liberación de dopamina, un neurotransmisor del cerebro, a modo de recompensa. El acto asegura que las mecánicas de juego están especialmente diseñadas para fomentar la dependencia, para así enganchar a los jugadores. Fortnite recibe nuevos modos de juego y armas con su última actualización
Jean-Philippe Caron, el abogado que encabeza la demanda, aseguró a AFP que los creadores del juego pidieron ayuda de “psicólogos para ayudar a que el juego sea adictivo” y, lo más importante, “no advirtió sobre los riesgos y peligros inherentes a su producto”. Este dato es especialmente importante, porque fue durante años un punto clave en la demanda contra las  tabacaleras.

“La adicción a Fortnite tiene consecuencias reales para la vida de los jugadores: varios no comen...