Gears of War es una saga muy especial para mi, primero porque fue el juego que me descubrió las «bondades» del juego online (aunque antes ya pasara por otros como Perfect Dark Zero), pero especialmente porque, debido a eso, conocí a mucha gente que hoy sigue estando cerca de mi. Por eso, el lanzamiento de una nueva entrega (incluso sin el «of War») es todo un acontecimiento y era obligatorio dar el placer de reproducir Gears 5 a mi Xbox One X.

He jugado al juego gracias a Xbox Game Pass Ultimate. Sí, debería haberlo comprado, y lo haré, pero esperaba algo más de mimo en cuanto a decisiones. Quería tener algo especial para acompañar mis impolutas ediciones especiales de la trilogía original.

Echo de menos una edición especial/coleccionista de Gears 5 para hacer compañía a las de la trilogía original — Gami (@Gami_es) September 11, 2019

Así, el día 5 de septiembre a las 21h pude, por fin, ponerme al mando de Gears 5. De entrada tenemos diversos modos de juego en el menú principal. He de reconocer que mi idea original era empezar únicamente jugando online, para así esperar a los compañeros de cooperativo y hacer la campaña juntos en Locura, como es costumbre, pero debido a los problemas de conexión no hubo más remedio que iniciar la campaña.
La protagonista de Gears 5 es Kait, que ya tuvo un papel relevante en Gears of War 4. The Coalition ha querido introducir nuevos elementos en el conjunto, aunque tardan un poco en aparece...