En septiembre de 2003 llegaba a las tiendas el juego oficial de la serie de Matt Groening. Una década y un lustro después, uno de sus "easter eggs" sigue siendo un secreto.Los desarrolladores de videojuegos adoran esconder secretos en sus juegos. O quizá simplemente lo hacen para entrenerse debido a un estilo de trabajo que depende de que sus compañeros acaben una parte de la producción para continuar con la siguiente tarea. Sea como sea, muchos títulos esconden Easter eggs, y parte de la comunidad de jugadores se pasan años intentando encontrar todos los posibles de sus juegos favoritos.Pero hay huevos de pascua que parecen condenados a no ser descubiertos nunca, y uno de ellos es de Futurama, una adaptación lúdica de la serie de Matt Groening que se puso a la venta en septiembre de 2003 para PS2 y Xbox.Así, han pasado casi 16 años y esos cazadores de Easter eggs aún no han conseguido alcanzar el huevo de pascua de Futurama. Aunque sí encontrarlo. De hecho, el Easter egg de Futurama es, precisamente, un huevo de pascua gigantesco escondido tras una pared. El secreto no es el objeto en sí, sino cómo alcanzarlo.Durante años, jugadores y modders han accedido al código del juego, a sus archivos, a su programación... Sin suerte. Lo único que saben es que la zona cercana al Easter egg inteactúa de algún modo con la memoria del juego, pero siguen sin descubrir cómo abrir esa pared para alcanzar el preciado huevo de pascua.Uno de esos cazadores de ...