Un análisis térmico de la nueva máquina de Sony, realizado introduciendo sensores en el interior de la consola, demuestra que la memoria llega a superar los 90 grados.PlayStation 5 es la consola más grande y pesada lanzada al mercado por los fabricantes principales. La justificación de su diseño está en que se han situado los componentes de manera que no se calienten en demasía y no ocurra lo mismo que con PS4 y sus revisiones (el ventilador acababa haciendo mucho ruido para disipar el calor). Ahora, un análisis de la temperatura llevado a cabo por Gamers Nexus ha demostrado un detalle curioso, y es que las carcasas o cubiertas laterales que cubren el cuerpo de la consola aumentan ligeramente la temperatura de sus componentes.En este primer análisis realizado con termómetros internos (hasta ahora habíamos visto otros en los que se analizaba la temperatura sin desmontar la consola) se demuestra que las carcasas blancas provocan un aumento del calor interno de hasta cinco grados centígrados. El módulo regulador de voltaje, o VRM, funciona a 71º, pero baja a 70,2º sin el panel derecho y hasta los 65,7º al retirar la carcasa izquierda que cubre el ventilador.La memoria GDDR6 alcanza grandes temperaturasDesde Gamers Nexus dicen que "la memoria ni siquiera tiene un disipador de calor" y eso se traduce en temperaturas altas: 93,3º centígrados con las tapas puestas; 88,6º C al quitar la carcasa izquierda y 93,2º C al retirar la tapa derecha. Aunque pare...