Cada vez es más habitual que las empresas ofrezcan a sus trabajadores la posibilidad de llevar a cabo sus tareas desde casa, dejando en manos del empleado que se organice de la forma que mejor se adapte a sus necesidades. Esto es perfecto para la conciliación familiar, pero para sacar adelante el trabajo, es necesario […]

Cada vez es más habitual que las empresas ofrezcan a sus trabajadores la posibilidad de llevar a cabo sus tareas desde casa, dejando en manos del empleado que se organice de la forma que mejor se adapte a sus necesidades. Esto es perfecto para la conciliación familiar, pero para sacar adelante el trabajo, es necesario disponer de una oficina en casa que ofrezca todo lo que uno pueda necesitar a la hora de trabajar. En este sentido, la decoración adquiere una gran importancia, aunque no siempre no siempre es fácil. Hay que tomar muchas decisiones como el tipo de silla, el escritorio o si hay que colocar muebles auxiliares de diseño. En cualquier caso, hay una serie de tips y principios básicos que es recomendable recordar para conseguir la oficina perfecta.
Espacio tranquilo
Lo primero, y una de las cosas más importantes, es elegir la ubicación que tendrá la oficina dentro de la casa. Esta zona debería estar aislada de cualquier fuente de ruido o distracción. Lo más recomendable es poder tener una habitación exclusiva para el trabajo, pero si no es posible, siempre se puede intentar instalar la oficina en cualquier rincón como el saló...